Por Peter Martin
Tomado de la revista Esquire Colombia
Y no podríamos estar más agradecidos. Cómo Windows finalmente es competitivo, y hasta quizá cambie la forma en la que usaremos Internet.
Después de décadas de un diseño relativamente aburrido y poco intuitivo, esperar que Microsoft actualizara su ubicuo sistema operativo Windows con algo distinto a los mismos cambios inútiles de siempre, era como esperar a que Steve Ballmer -presidente de la compañía- apareciera con un nuevo corte de pelo. Su forma estaba tan indisolublemente unida a la función que apenas se podía distinguir entre las dos. Y entonces, Microsoft anunció Windows 8.
Es muy posible que usted haya escuchado sobre el nuevo software, o incluso haya descargado la versión de prueba para usarla en el computador de sus papás. Pero, si no lo ha hecho, aquí se lo contamos: el 26 de octubre, Windows 8 aparecerá en los nuevos PC. Y por primera vez, todos podrán comprenderlo, casi de inmediato. La pantalla de inicio viene del torpemente nombrado Windows Phone 7 de Microsoft: se trata de una cuadrícula colorida con viñetas vivas. No son íconos pequeños repartidos en un escritorio a los que se accede por medio de un árbol de inicio, sino cuadrados y rectángulos grandes que llenan la pantalla completa. Estas viñetas se actualizan constantemente, pasando por las noticias, sus mensajes y cualquier foto de comida que sus amigos publiquen en Instagram. Es simple. Una interfaz para idiotas, como esos teléfonos para abuelos con botones que muestran las caras de las personas a las que más llaman.
No es que hayan idiotizado el Windows 8, más bien lo racionalizaron. Es intuitivo. Pulse una viñeta y llegue al programa. Para descartarlo, solo arrástrelo fuera de la pantalla. También puede dejar los programas en una pequeña barra de actualización en el costado. Para volver a la pantalla de inicio solo presione la tecla de Windows. Si esta le parece muy difícil de encontrar, las esquinas de la pantalla también sirven como hot spots. La esquina inferior izquierda es para encontrar las viñetas del inicio; la superior izquierda le muestra el último programa que usó, o puede deslizar el mouse hacia abajo y escoger cualquier programa que esté corriendo por detrás. La función de búsqueda es quizá la más sencilla: desde la pantalla de inicio, simplemente empiece a escribir. Automáticamente se abrirá la barra de búsqueda para ubicar todo lo que haya guardado en su computador o en lo que pueda acceder a través de cualquiera de sus aplicaciones. Por ejemplo: digamos que a usted le gusta Pitbull. Escriba «Pitbull» en la pantalla de inicio y le mostrará todo lo relacionado con él que usted haya guardado en su computador, desde álbumes hasta videos de baile hechos en casa. Pulse la aplicación de noticias y encontrará todas las historias recientes sobre Pitbull. Pulse una aplicación de música como Slacker Radio y lo llevará a una estación de música de Pitbull, que puede colgar en la pantalla de inicio.
Lo más interesante de Windows 8, aparte de su habilidad para simplificar la búsqueda de música dance, es lo que significa para el futuro. Una vez que utilice un computador con Windows 8 por unas cuantas semanas, usted va a querer que todo sea una viñeta. Especialmente los sitios de Internet. Sin importar cuán bueno sea un sitio, nada supera la experiencia optimizada de una aplicación. Sin barras de herramientas desorganizadas ni URL y, lo mejor de todo, muy pocos o ningún aviso publicitario. Así planearon que fuera la experiencia de Internet. Perfectamente ordenada. Simple. Tal como Windows 8.