Por medio del comunicado No 0001 del 14 de julio del 2016, firmado por alrededor de 4.000 ciudadanos, los habitantes del municipio de El Doncello en el departamento del Caquetá, le notifican al Presidente Juan Manuel Santos y al gobernador Álvaro Pacheco Álvarez, que votarán negativamente el plebiscito por la paz, si antes el gobierno nacional no ordena la salida de las petroleras del Caquetá.

Por su parte la alcadesa de esa localidad Sandra Milena Losada Floriano, hizo un “llamado urgente al gobierno nacional y a Ecopetrol, para que las comunidades puedan ser escuchadas y consideren la posibilidad de suspender las actividades petroleras en el Caquetá, máxime cuando nos encontramos en la consolidación de un proceso de paz y solo la lograremos construir, concertando con las comunidades las políticas y los macro proyectos”.

Lo anterior es el reflejo de lo que está pasando en la región, en donde existe una férrea oposición a la explotación petrolera y los campesinos en algunos sectores, como en  las veredas La Curvinata del municipio de Valparaíso y La Arenosa en El Doncello, están decididos a no permitir la entrada de las multinacionales del petróleo, manifestando inclusive que no le tienen miedo ni al Esmad ni a los gases, refiriéndose a los incidentes que ya han tenido con la fuerza pública desde el año pasado; los labriegos dicen que para ellos el agua es más importante que el petróleo.

Por su parte el alcalde del municipio de Morelia Yovanny López Ramírez, dijo que La Procuraduría le había enviado un oficio solicitándole el apoyo para que las petroleras pudieran cumplir a cabalidad los contratos que les ha sido asignados por el gobierno nacional, pero que estaba preocupado por la situación de orden público de su  municipio, porque los campesinos y la ciudadanía en general no querían la intervención de las multinacionales del petróleo.

A el comunicado de los doncellenses amenazando con votar negativamente el plebiscito si no salen las petroleras de la región, se suman las declaraciones de la alcaldesa del Doncello y el alcalde de  Morelia, la férrea defensa del territorio y el agua que vienen haciendo algunos diputados a la Asamblea, principalmente Arturo Mayorga, la labor informativa de La Universidad de La Amazonía que por medio de un serio trabajo de investigación ha denunciado afectaciones al medio ambiente y el trabajo informativo de ambientalistas como el Ingeniero Esteban Cabuya, son un reflejo de la férrea oposición de la región a la explotación petrolera y de lo que sería la decisión popular sobre la paz, en un eventual plebiscito que de un momento a otro se está convirtiendo en un arma de defensa del territorio y el agua en La Amazonía colombiana.

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