Tal como ha sucedido en momentos cruciales de la historia, cuando los gremios económicos que ostentan el poder  se aferran obstinadamente a la protección y crecimiento desaforado de sus feudos, los jóvenes aterrorizados por la destrucción casi inevitable del  planeta, han vuelto a tomar las banderas de su innata rebeldía, para luchar contra aquellos que están acabando con  el planeta, llevándolo aceleradamente a su destrucción.

Las intervenciones ante las instancias mundiales, entre estas la ONU, de la adolescente de 16 años Greta Thunberg, han sido significativas estocadas contra los dirigentes del planeta, que predican su asombro y enojo por la destrucción de la naturaleza, mientras que en sus países continúan esa destrucción disfrazada con la necesidad imperiosa de proteger las economías nacionales y el progreso, cuando lo que buscan proteger son sus propios intereses y los de sus socios.

Los jóvenes ya están cansados de esa cháchara pegajosa y maligna que sigue engañando a los pueblos con migajas, mientras siguen y siguen explotando los recursos naturales, ampliando las fronteras agrícolas y ganaderas, entregándole a las multinacionales los combustibles fósiles para seguir enriqueciendo a los más ricos y presentándose como los ejemplos salvadores del planeta en la lucha contra el cambio climático.

Para no ir más lejos, Colombia es un claro ejemplo de esta maligna práctica que solo busca proteger los intereses de las multinacionales y esta práctica malévola la endulzan con diplomados e invitaciones a los medios de comunicación para que agachen la oreja y no digan esta boca es mía, y por otro lado,  el Presidente Iván Duque se presenta ante la ONU como el adalid de la lucha contra el cambio climático en América Latina, mientras su Ministra de Minas y Energía sigue asustando al pueblo con el cuento chino de que el gas natural se va a acabar en 9 años y cerca de 40 millones de colombianos van a padecer hambre porque no van tener cómo cocinar sus alimentos, razón por la cual es necesario implementar el fracking en el país, la forma de explotación petrolera más dañina de que se tenga conocimiento en la humanidad.

Y mientras esto sucede, los cacaos que controlan el gobierno y por ende los grandes medios nacionales, continúan emitiendo programas populistas para mantener embobada la opinión pública y alejada de los temas fundamentales que le competen a todos; el tal “Desafío Super Regiones” y otros programas similares, son parte de  esos sofismas de distracción para poner a la gente a discutir estúpidamente sobre temas vanales, mientras que los asuntos de fondo que verdaderamente perjudican a la gente, continúan su camino asesinando el futuro de las siguientes generaciones… o quién se escandaliza en los medios por los billones que trimestralmente ganan los bancos o los billones que reportan de ganancias las petroleras que a diario roban al país?

Pero parece que las cosas están cambiando, los viejos seguimos con las mismas mañas de siempre pero los jóvenes están despertando y cientos, miles, millones,  se están tomándo las ciudades en todo el mundo para exigir un cambio AHORA, no más cuentos, no másforos, reuniones y espejitos para engañar a todo el mundo; los jóvenes están exigiendo medidas inmediatas, la terminación de la explotación de combustibles fósiles, la inversión en energías limpias y renovables, están exigiendo a los gobiernos que actúen y dejen su acostumbrada cháchara, dejen de seguir engañando a la gente con limosnas como algunos programas “sociales” que solo buscan acentuar la pobreza de las gentes induciéndolas al facilismo, a la limosna fácil  y a la pobreza. Los jóvenes están despertando y si no se les escucha, muy probablemente cientos de Bastillas de las mismas de la revolución francesa, estarán  afilando sus guillotinas  en todos los rincones del planeta.

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