Una publicidad que repentinamente salió en las redes sociales, publicidad en la cual se presenta al candidato a la Cámara Antonio Ruiz Cicery, “Coco”, como candidato de las Farc, no es más que la punta del Icberg en que se han convertido las campañas políticas, son individuos que se han sumado a la estrategia de denigrar y desprestigiar sin buscar los potenciales electores con propuestas realizables, con hojas de vida impecables que sean garantía de éxito de quien se promueve; lo hecho con Coco, además de ser un verdadero boomerang para quien o quiénes lo hicieron, demuestra bajeza, es como tratar de limpiar un objeto con las manos llenas de hollín.
Aclaramos que no somos seguidores de Coco ni de ningún otro candidato a la Cámara o al Senado, simplemente damos nuestra opinión que como tal puede estar errada, pero si tenemos claro que a los candidatos se les debe promocionar o descalificar por su hoja de vida, por sus actos, especialmente administrativos y en el caso que nos ocupa, quien quizo denigrar de esta forma contra el candidato Cicery, más bien debió buscar en su trayectoria que cola tiene para pisarle o si de verdad es una propuesta positiva para el departamento.
Antonio Ruiz Cicery fue alcalde de Belén de los Andaquíes; bien pudieron haber averiguado que tipo de administración hizo, si ese municipio progresó, se estancó o por el contrario retrocedió cuando el mencionado candidato fue su administrador; ese si sería un termómetro para medir la potencialidad de alguien que tiene derecho a aspirar y que tiene el derecho, como todo ciudadano, a que se le respete.
Ahora Bien; ese tipo de publicidad es de doble fondo; se quiere de paso atacar también a las Farc sin tener en cuenta que ya es un partido político dentro de la legalidad y sus integrantes, salvo las excepciones de Ley, tienen derecho a aspirar a cargos por elección popular; presentarlos como terroristas no es una forma elegante y seria de hacer política; denigrar solo sirve para degenerar aún más el proceso eleccionario que se avecina, e incluso, para generar violencia.
Por lo pronto “Coco” está en la pelea por la Cámara y bien podría decirse que está ocupando un sitio de privilegio en esa competencia conjuntamente con el candidato liberal Harry Giovanny González Arias quien ya logró el apoyo de los goditos que dejó huérfanos la ineficiencia de Urrego. En el Centro Democrático las cargas apenas se están ajustando y de quienes están en esa lista, Edwin Valdés, James Villanueva y Sandra Milena Rojas, casi no se les nota que están en campaña y el tiempo apremia; el Polo con su eterno candidato se ha dedicado a la publicitarse por las redes sociales, quizás con poco éxito porque las naturales réplicas no se hacen esperar; por lo demás, solo esperemos que la guerra sucia no continúe y que las propuestas salgan a la luz pública para que los electores sepamos a qué atenernos.